La cantautora tenía 68 años. Su carrera comenzó en los ´80, cuando volvió a Buenos Aires luego de vida hippie en El Bolsón.
aría José Cantilo, cantautora que despuntó en el rock nacional como referente de la canción folk, murió este lunes luego del agravamiento de un delicado estado de salud.
A la noticia la confirmó su hija Aimé Cantilo, también música, en una historia de Instagram. “Te fuiste mami, te fuiste en paz”, dice el posteo de Aimé, que a su vez pone la fecha de nacimiento y de fallecimiento de la artista que sus íntimos, amigos y seguidores conocían como “Mariacho”.
LA TRAYECTORIA DE MARÍA JOSÉ CANTILO
María José Cantilo es porteña del barrio de Belgrano, donde nació y se crió en una familia de diez hermanos. El mayor de ellos es Miguel Cantilo, una de las mitades de Pedro y Pablo.

Comenzó a tocar la guitarra a los siete años y compuso su primera canción a los 17, una etapa de su vida en la que ya curtió toda la bohemia desatada en una casa de la calle de Conesa, en barrio Saavedra, instituida como base de operaciones y de experiencias de Pedro y Pablo.
Fue allí que tomó contacto con la aristocracia rockera de la época (Moris, Pappo, Roque Narvaja, Miguel Abuelo, Kubero Díaz y Jorge Pinchevsky) y que recrudeció la posibilidad de desarrollar una vida alternativa a otra en la que imperaran las directivas sociales para la burguesía.
En ese contexto, María José Cantilo se instaló en El Bolsón, Río Negro, para ser consecuente con sus ideales hippies.
Pero su carrera como cantautora comenzó a desarrollarse poco después de su regreso a Buenos Aires en 1982.
Su primer disco salió en 1984 (con participaciones de David Lebón, León Gieco, Osvaldo Fattorusso, Daniel Colombres y, claro, Miguel Cantilo y tanto antes como después de su edición participó del floreciente Festival de La Falda.
Su segundo disco se publicó en el enrarecido 1989 y con un título, En banda, que aludía a que se trataba de una solista potenciada por sus acompañantes eventuales. A saber: Oscar Moro, Claudio “Pato” Loza, Gustavo Dinerstain, Angel Lombardo, Diego Gesualdi y otros.
Luego de realizar una osada producción para Playboy, en 1992 María José Cantilo fue etenida por tráfico de drogas y debió pasar dos años y ocho meses en la cárcel de Ezeiza.
“Se comió tres años presa por 200 gramos de porro, que es algo ridículo; y básicamente, a mí me arruinaron la vida en ese momento. Pasé de ser un pibe de clase media, que tocaba la guitarra feliz, a ser otro marginal. Tenía 14 años”.
“Me salvó la música porque fueron años en los que yo estuve sin padres y sin plata”, contó Gaspar Benegas, hijo de María José y guitarrista de Indio Solari, en una reveladora entrevista con Filo News.
En 2000, la cantautora reimpulsó su carrera con un disco de versiones (Covers), al que le siguieron Momento de boleros en 2005 y Aquí y ahora en 2006.
En el extremo de su discografía está Esencia, de 2011, que con contó con la producción de Gaspar, quien priorizó captar la expresión pura de su madre por sobre cualquier ornamento tecnológico.