Una abuela fue víctima de una salvaje golpiza y tortura por parte de un grupo de delincuentes que ingresó a su vivienda de Bernal. El hecho quedó registrado por las cámaras de seguridad y muestra que el episodio se extendió durante una hora y media. Está internada en estado delicado.
Todo comenzó alrededor de las 4 de la madrugada de la semana pasada, en una casa ubicada en Cerrito al 700 entre Dardo Rocha y Falucho, donde dos delincuentes ingresaron a través de un ventiluz y la torturaron en la fábrica que está en el mismo predio y pertenece a su familia.
«Estuvieron una hora y media torturándola, pegándole, exigiéndole dólares que no había, le pegaron golpes de puño en la cabeza, le aflojaron la dentadura, le pegaron en los pulmones, en los pechos, se cayó y le pegaron una patada en el piso», relató Alejandro, hijo de la víctimas, en declaraciones a los medios de comunicación.
El hombre afirmó que a su madre «la arrastraron, la llevaron a su cama y le tiraron una manta arriba», tras lo cual la amenazaron con prenderla fuego mientras le dijeron «‘vieja de mierda, ¿dónde están los dólares?’».
Los ladrones llevaron a la jubilada a la fábrica que la familia tiene de hilado plástico y de tejido de bolsas para cebollas, situada al lado del inmueble, donde la continuaron torturando mediante golpes, lo que fue registrado por una cámara de seguridad instalada en el lugar.
Tras el ataque, los delincuentes huyeron con algunas pertenencias de la víctima.
«Mi mamá, a los 93 años, es la que abre y cierra porque esto trabaja 24 horas. Yo creo que la fábrica no sigue, estoy casi decidido, depende mucho de la salud de mi mamá, ella no quiere estar más acá, está con ataques de pánico», indicó el hombre.
Alejandro añadió que anoche pensó que «se moría porque estaba muy mal», aunque «hoy amaneció un poco mejor y está estable».
«Le generaron líquido en el pulmón de los golpes que le pegaron con la parte de atrás del filo del cuchillo y eso generó una neumonía», precisó sobre el estado de salud de su madre, quien está internada en el sanatorio Modelo de Quilmes.
El hecho es investigado por la fiscal Karina Gallo, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 del Departamento Judicial Quilmes, quien dispuso una serie de medidas tendientes a identificar a los agresores.